José Luis Checa Cremades

Ramón Miquel Planas “El libro –escribió́ Ramón Miquel y Planas- es la obra más perfecta que ha salido de las manos del hombre. Es un todo completo donde se reúnen un elemento espiritual, que es la obra literaria fruto del pensamiento, y un elemento material, que es el libro como obra tangible. Libro perfecto es aquel en el que ambos elementos -cosa y alma- se corresponden dignamente, aquel donde la belleza de la obra literaria tiene una exacta correspondencia con la belleza y perfección de sus componentes materiales. Esta es la concepción de libro que tienen los bibliófilos”. Objeto material, opus mechanicum , y a la vez discurso dirigido al público. ¿De qué́ libros nos está́ hablando Miquel? Sin duda de ejemplares de tirada limitada donde colaboraron un escritor y un artista grabador, de libros raros con signos visibles de su historia, con defectos de impresión, con marcas de personajes ilustres, de los que tenían anotaciones de antiguos poseedores, del autor, de comentaristas

CÓMPRALO AQUÍ El libro antiguo ofrece al lector español un  panorama general sobre el libro antiguo. Son muchos quienes piensan hoy de él que es un objeto anquilosado, exclusivo, materia de guardarropía pasto de ratas de biblioteca. Nada, quizá, más lejos de la verdad. Si lo observamos de cerca, enseguida percibimos su naturaleza de caja de resonancia donde palpitan al unísono los problemas industriales, económicos, artísticos, ideológicos y culturales típicos de los siglos que lo vieron nacer. Convencido de esto, el acercamiento que proponemos aquí al códice impreso llamado libro tipográfico no se disciplinará a ninguna metodología de escuela (hay muchas): no solo tipobibliografía, veterobibliografía positivista (árida, pero necesaria), no exclusivamente bibliofilia (a un paso de la bibliomanía y a dos de la bibliofrenia), también sociología del libro y la lectura, además bibliografía textual. La comprensión cabal del invento de Gutenberg