El Manual del encuadernador, dorador y prensista (Barcelona, librería Salesiana, Biblioteca profesional E.P.S, reeditado en 1941, 1960, 1966 y 1971) ha formado a varias generaciones de encuadernadores españoles. Se propuso modestamente “dar a los aficionados los conocimientos más indispensables para que por sí mismos pudieran irse orientando y disponiendo para ejecutar sus trabajos con el mayor gusto artístico”. La que sus autores califican de “obrita abierta a las observaciones para alcanzar el máximo de eficiencia” es, en realidad, un libro muy didáctico con definiciones cla- ras y sencillas de métodos de trabajos, operaciones y utillaje. Tras una breve historia de la encuadernación, la primera parte de este manual repasa la nomenclatura del libro, expone el doblado, los métodos para plegar, intercalar, interfoliar, alzar los libros, empastar, coser con hilo de libro, coser a máquina, a la rústica, prensar y batir libros, plegar las guardas y doblar planos y tapas. En la segunda parte se tratan especialidades ligatorias: encuadernación en cartoné, cosido al telar, preparación de los libros para cortar, encolar, trabajo con cartones, telas y cartulinas, manejo de la cizalla, entrado de los libros en tapas, sacado de cajos y enlomado e intercalado de ilustraciones fuera del texto. En la tercera parte se explica el manejo de la guillotina, el corte del papel con guillotina, el chiflado de pieles, la puesta de guardas, la encuadernación en pasta y la confección de cajas y estuches. La cuarta parte trata el dorado de cortes, la manipulación del oro, el bruñido del corte, encuadernaciones de álbumes y estampado de rótulos y tejuelos. En la quinta parte se estudia la ornamentación de lomos con nervios, la prensa de estampar, la preparación de la plancha, la estampación con gofrado, la estampación de tintas litográficas, de purpurina, oro falso y película, de oro fino en relieve, de tintas so- bre seda o terciopelo, la ornamentación en mosaico, el cincelado de los cortes y se dan nociones de restauración de libros. En un apéndice se explica el repujado del cuero. Todo se hace con definiciones claras y sencillas e ilustraciones muy explicativas.
La Librería Bardón de Madrid es un punto de referencia obligado para los aficionados a los libros antiguos de Madrid. La fundó en 1947 Luis Bardón López (1897- 1964) en la plaza de San Martín, próxima al Monasterio de las Descalzas Reales, y desde sus inicios se llamó « Librería para bibliófilos ». Puede leerse este nombre en la fachada del establecimiento, si bien hoy el nombre comercial es simplemente « Librería Bardón ». Se ha querido con ello dejar clara la naturaleza familiar del negocio. Como en otras actividades, entre los libreros la familia desempeña un papel crucial en la transmisión de saberes y habilidades. Éstas perviven en el tiempo porque pasan de padres a hijos. En muchas sagas libreras los valores de la satisfacción interior y el compromiso del « trabajo por el trabajo » han predominado sobre el protagonismo de sus miembros dando lugar a exce...
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